domingo, 31 de enero de 2010

Me dijeron que estabas aqui y vine volando

Domingo me nubes y me calora, pero me sonriza y me cosquilla.
Para Perla, Rita, Rubia y Haragana. Por una buena cerrada de ojos como esta.

jueves, 28 de enero de 2010

martes, 26 de enero de 2010

Me pone de muy mal humor

que el kiosquero que me gusta se haya ido de vacaciones

jueves, 21 de enero de 2010

500 días con Tom



Tom entendelo, no se enamoró, simplemente. No tiene nada que ver con el destino y todas esas paparruchadas. Tampoco sé si los astros estaban como locos y más tarde se le alinearon y por eso terminó casandose con otro. Simplemente sé que cuando estaba con vos, te quería, te adoraba, pero no te amaba. Esas cosas suceden Tom. No creo en el "no tenía que ser", no, creo que "no fue", lisa y llanamente. Qué importa si estaba escrito o no. Además, dónde iba a estar escrito, en las tablas de Moisés? En dónde se escribe la historia de una persona. No fue y ya. Listo. Porque estabas vos y estaba Summer y estaba el amor. Pero entre medio de uds tres, se metían sin permiso infinidad de objetos amorfos llamados: circunstancias. Hechos, pensamientos, estados de humor, palabras, gestos, coincidencias, desacuerdos, peleas, caricias, putas cosas que hicieron, en conjunto con el corazón y la cabeza, que ustedes dos no hayan funcionado. Tom, no dependía de vos únicamente, no dependía de ella únicamente. No dependía del destino. Dependía del gran conjunto de cosas que forma nuestra existencia. Y si los planetas tienen algo que ver, no lo sé, también ya que estamos los metemos en la bolsa, total una mancha más al tigre.....

Te entiendo, no creas que no, quisiste pensar que era perfecta. Que eran eternos. Que cuando ella bajaba los ojos, era simplemente dolor de cabeza y no desamor. Que cuando te dijo no quiero compromiso, pensaste que se le pasaría en unos días. Que cuando jugaban a ser marido y mujer, ella se lo creía más que vos. Y no. Pensabas demasiado Tom. Y te enamoraste. Te pusiste la venda en los ojos y caminaste de su brazo por un campo de flores, que a veces olía mal y pensabas...debe haber pisado caca....no es nada, sigamos. Y un día ella te sacó la venda y dijiste: que demonios! que pasó acá? En que momento me cambiaron la escenografía y yo no me dí cuenta. Y ella te dijo: no te hagas el sorprendido.

En ese momento Summer no se enamoró de vos. Pero no porque ella estuviera destinada a no quererte o a casarse con otro. Summer quiza, un año después se hubiera enamorado de vos. Si no encontraba al otro. Quien sabe, se encontraban en una heladeria, vos pedías chocolate con almendras y ella te sonreía y empezaba a nacerle de nuevo ese no se qué adentro.

Si, es un tanto desesperante. Si es tan grande el conjunto de cosas que afectan una relación, entonces, cómo demonios se logra el equilibrio entre todas ellas.  Cómo dos personas llegan a coincidir en tiempo, lugar y cariño, como para jurarse amor eterno. Cómo los planetas se le pueden alinear a una persona y justo también alinearseles a la otra. Sí Tom, soy de los tuyos, parece un imposible. Pero quién sabe, como nada esta escrito y todo es una mera coincidencia, hoy vas a una entrevista de trabajo y te pones a charlar con tu contrincante mientras esperan que los llamen. Justo ella es una morocha divina que te mira con ojos inmensos. Quiza sos medio zota y no pasa nada. O quiza te animás y porque se te da la gana, la convertis en la madre de tus hijos.

Y el destino, que se tome vacaciones porque no toca ningun pito en este asunto.

http://www.youtube.com/watch?v=b-wEibP-xLE&feature=related

miércoles, 20 de enero de 2010

Mi relación con los libros






(es sacarles fotos a la gente que los lee)

Una de tres

Una Nikon D300
Una visa de trabajo española
O Greys Anathomy con buñuelos de berenjena a la buziana

jueves, 14 de enero de 2010

Elijo el recuerdo

Mejor buenos recuerdos, que un pasado perdido, dice Pedro Guerra. Y que no hay nostalgia peor, que añorar lo que nunca jamas sucedió, dice el otro. Entonces qué, mejor frenar a tiempo para llevarse en el corazón solo sonrisas y un rostro brillante en la memoria? Qué hacemos? Congelar como si fuera una foto ese momento feliz y guardarlo en la valija con papel manteca para que no se arruine. Y una vez de regreso, sacarlo y colgarlo al lado de la cama, para traer a la conciencia de a ratos, eso que fue alegría y color.
Pero qué pasa si en vez de congelar, saco la pausa y la escena sigue, unos años más. Me ahorro añorar aquello que nunca pasó, o no? Lo compruebo, lo vivo, lo experimiento. Y qué pasa si la escena se vuelve oscura y la película se torna de terror. No hay foto que la salve, ya no puedo congelar nada. Solo serían noches de insomnio en verano, recordando aquellas tomas estropeadas de una película mal grabada en el cine.
Pero qué pasa si la película finalmente terminaba en un parque, él leyendo un libro, ella recostada con la cabeza en sus pies y sus manos sobre su panza de 8 meses. Qué pasa si yo era Julia Roberts y le puse pausa. Ah, te moris. Por suerte nunca lo sabré.
Entonces prefiero pensar que Huge Grant se volvía panzón, alcohólico y violento. Ella, madre de mellizos, abandonada por su marido y drogadicta.
Yo mejor le pongo pausa en la parte que se besan de noche en el jardín. Qué mejor recuerdo que ese, radiantes los dos, alegres, sin apuro, ellos mismos, tal cual son, sonrientes, deseandose el uno al otro, con ganas de un para siempre, pero sin certezas ni expectativas. Sonriaaaan....click!!


A mi me gusta recordar, cómo voy a ser tan idiota de no acceder a aquellas páginas del best seller de mi vida. Es cierto que por momentos dan ganas de arrancarse el corazón del pecho, al pensar que sucedió empíricamente y hoy está tan lejos de la realidad. Pero es gratis meterse en esa película y es increíble disfrutar de esa noche, con la luna llena, llegando a esa ciudad, con la emoción al borde del colapso, con el pecho ensanchado de sueños. Cómo no lo voy a hacer......

Pero qué pasa, qué pasa si esos recuerdos que guardo en la mesa de luz, no son tan brillantes, ni tan alegres, ni tan de colores. Si eso pasa, cierro los ojos, doy vuelta la foto y sigo durmiendo. Mañana pongo otra nueva. Esa, que estoy mirando a la cámara, con un pañuelo en la cabeza, pensando en lo feliz que la vida puede ser con tan solo mirar el mar.

martes, 12 de enero de 2010

Un poco mal estamos


Me bajo en Plaza Italia, tomo la escalera mecánica (por supuesto) y él toma paralelamente a mí, la otra. Me llama la atención, va solo en su camino, el resto de los pasajeros usamos métodos más rápidos (o más cómodos?). Lo veo acomodarse su mochila tan canchera y descubro su perfección. Usa jeans, seguro son Levis, de ese color tan..., tan Levis. Tiene ese ya saben qué, que hace que le quede tan bien el jean. Usa remera extremadamente sexy y obviamente blanca. Es la perfección. Y seguro, seguro, seguro huele bien. Sale por la misma salida que yo. Dobla exactamente por el mismo lugar y entonces decido: Santa Fe o Uriarte? Por donde vamos, amor? Ok, vamos por Uriarte.
Lo sigo casi pegada. Me miro en una vidriera, todo bajo control, esa pollera lo mata seguro. Él saca su celular y veo que habla. Entonces me voy de mi vida de video clip y me saco los auriculares. Me hubiese encantado escucharle la voz, pero llego tarde, corta antes de que lo pueda disfrutar.
Estamos al lado, los dos perpendiculares a la calle y no me mira. Todavía no me mira, pienso.
¿Qué estoy haciendo? Sigo, intento pasarlo, no va a poder evitar mirarme, si no hay nadie más en toda la cuadra. Pero sus pasos son largos y perfectos. Llegamos a la esquina y frena. Freno. Disimulo, busco en el bolsillo. ¿Qué? No sé, muevo la mano en una interpretación estelar. Mi amante mira al frente y corre al cruzar, se va por Uriarte. Se me va. Uriarte me lo arranca. Se me escapa entre las baldosas, es tan triste. Yo debo doblar, me desvíaria demasiado si lo sigo más cuadras. Pero lo dudo. Hasta que la razón me visita y lo dejo ir.
Adiós mi rey. Ya extraño las navidades que no pasamos juntos, los regalos de cumpleaños que nos nos dimos y las peliculas que nunca llegamos a ver.
Fue hermoso mientras duró.

viernes, 8 de enero de 2010

Charla con Ashley

Yo: Estas hablando muy bien español!!!
Ashley: Oh gracias for la commenta de mi hablando en espanol, esta precio y importante, mi español es terrible comparado a cuando viví en Buenos Aires.
Bien, debo regresar a trabajar, pero yo le pierdo y su familia tanto y quiero regresar a visitar, optimistamente pronto... un monton de besos y amor a todo.

(Heavy metal hablar con Tarzán.)


Yo, secretaria II - A calzón quitado

Ok. Le charlo porque soy la secretaria del consultorio. Pero yo sé que no trata bien al marido. ¿Es que tengo que tomar partido por él? De todos modos le charlo y ella, encuentra en mí a la mejor amiga que nunca tuvo. Llega, lo deja a Oscar y se va a cocinar a la casa. Después de cuarenta minutos vuelve a buscarlo. Mientras espera que salga del baño su marido, me cuenta lo del accidente del año pasado, el que ya me contó algunas veces. Me cambia un poco los detalles, ya no era un policia que la recogió del piso, sino dos ambulancias y no tardó dos meses en recuperarse, sino seis."No te exagero Miranda eh, si querés te muestro la cicatriz en la pierna" "No Delia, me imagino, que problemón (digo "problemón", sí)" "No, pero te muestro para que veas" (y amaga a bajarse el cierre) "No claro Delia, deje, me imaginooo!!" "No, pero mira si no me cuesta nada...." "No, si debe ser enorme, deje, no me muestre, no se moleste (y no me moleeeeste!)" "Ahi tá....mira!" EN MILESIMAS DE SEGUNDO,  LA SEÑORA DE GIMENEZ ESTABA EN BOMBACHA, CON LA CARTERA PUESTA Y LOS PANTALONES POR EL PISO, EN LA MITAD DE LA RECEPCIÓN DEL CONSULTORIO. Mis ojos no podían creer el panorama. "Ves lo que te digo? quince centimetros Miranda, quince" "No, si, veo, veo....terrible.....pero por qué no va subiendose, a ver si llega alguien, no?" "No, pero toca, mirá que salida que esta" Dios mío, imaginense el cuadro si entra mi jefe: La mujer de un paciente en pelotas en medio del consultorio y yo agachada tocandole la pierna. Me parece un poco fuerte.

Por suerte se fueron de vacaciones y no vuelven hasta dentro de dos semanas.
Ahora me tengo que dormir con la tele prendida para no soñar con ella.

miércoles, 6 de enero de 2010

Curiosos deseos

9 am leo mail de mi stromboli madrileño:

"Bueno, voy a ver si los reyes me trajeron todo lo que les pedí....viajes, novios, señoras que limpian, empanadas, etc..."

martes, 5 de enero de 2010

Heineken y Corona

Cervecita con Chochi. A pesar de ser intensamente atrapantes nuestras charlas, en medio segundo, ella o yo podemos desviar la mirada si pasa un masculino. Necesitamos darle puntuación. Es inevitable. Sea feo o atractivo, necesitamos darle un vistazo. Luego la mirada regresa y se agrega un: claro, tal cual! En referencia al tema que se venía tocando, como si nada hubiese pasado.
Asi es que pasa un sujeto, al cual las dos miramos.

Ella: Te das cuenta, tiene bolsas del Disco, es obvio que salió de trabajar, paso por el super y ahora lo espera su mujer en su casa. (Y se muerde el labio, en plan "qué romantico")
Yo: Qué sabés, puede ser un soltero que vive solo y fue a por sus víveres.
Ella: No, los solteros no van al Disco, van al chino.

Menuda máxima me tira la Chochi. Esta piba sí que sabe de la vida.

Pasan 15 minutos y vemos al chico de las bolsas, sin las bolsas, pero con una maleta en una mano y en la otra, su novia/esposa felizmente a su lado.

La Chochi me mira resignada, toma un trago y dice: no ves?


(Puta que me falta aprender.... )

Conciencia política

Me levanto temprano. Es primero de enero. Lucy sale a correr. Sí, primero de enero y sale a correr, antes de que el resto del mundo despierte. No me entra en mi masa encefálica semejante hecho. Eso sí es voluntad. Y ya ni siquiera pienso: "yo debería hacer lo mismo". No, hace rato que no pienso esas estupideces. Saco la silla afuera para mirar el mar. Y me concentro en la tarea que debería haber hecho el día anterior, la de los deseos. Me sale rápido, no tardo más de 10 minutos en escribir las doce cosas que deseo para este nuevo año. Antes de que termine sale mi padrino y me dice: tomamos el desayuno gorda?
Después de las cinco medialunas, le propongo a mi sobrino la actividad de los deseos. Sorpresivamente acepta y nos vamos afuera a redactarlos. Él pica la pelota, yo me siento en el escalón con el cuaderno. Le cuesta soñar, se desespera, desea todo y nada. Es su gran oportuinidad de pedir y no le sale. Pica la pelota más rápido y se le va lejos. Se desespera más. Entonces lo ayudo y le doy ideas. Y solito comienza a pedir, feliz de haberse soltado. Por supuesto fue un pacto entre los dos, con lo cual no puedo escribir sus anhelos para este año. Pero sí, tengo que compartir el número 11. Cuando lo induzco a pedir algo más trascendental que ganar el jueguito de Bakugan y le digo: algo que quieras pedir que pase en el mundo...? Y responde sin dudarlo un segundo: AH SI, QUE LO SAQUEN A MACRI A PATADAS.
Tragando la risa, escribo con cara de seriedad. Y pienso que mi sobrino de seis años tiene las ideas bastante claras. Quiere jugar, ser el mejor, que su familia sea feliz y que al mundo lo gobierne sin dudas, su mamá y su papá.
Qué año te espera Mauricio....!


domingo, 3 de enero de 2010

Dos mil diez, nada de mágico.

Van tres días.
Y volví a casa.
Pongo el cd que me dejó Karen, la americana. y suena Michael Bublé y me dice: I cant belive it´s over. Y pienso: I cant belive que suene esta canción justo en este momento. Igual la dejo. Es destripantemente linda.
Me miro la piel, la tengo más roja, entonces pienso: algo cambió con el 2010!
Pero mi cuarto sigue igual, mi mesa sigue llena de cosas y las ganas de sacarlas, siguen siendo las mismas. Me sigo comiendo los dedos y leyendo los blogs ajenos. Y sigo pensando: cómo no se me ocurrió esto a mí? Alguna genialidad tengo que escribir yo! Sigo siendo la misma, me sigo creyendo mil.
Tengo el pelo más largo y unos gramos menos, pero sigo tardando días en desarmar un bolso y sigo pensando que aún no es tiempo de arrancar. El año que viene...mejor. Pero, vamos Miranda, que el año que viene ya llegó. Fijate. Manejalo.
Sigo dándole rienda suelta a los recuerdos y sigo preguntándome por qué. Sigo dejando entrar al monstruo de vez en cuando y sigo pidiéndole compasión. (Qué ridiculo, si los montruos son malos, feos y solo quieren matarte con un hacha gigante.)
Sigo pidiendo los mismos deseos de siempre, con alguna que otra modificiación. Y sigo pensando que se van a cumplir. Qué onda con eso?
El 1ro de Enero y siete minutos recibí un abrazo, de esos buenos. Y además vino acompañado con un tequieromucho. Después de dos días pienso, que no fue tan malo el comienzo de esta década divina. Y que aunque siga siendo la misma, los cambios están al tiro!!!




La vida puede esperar cinco minutos más, pienso.